Y llegan los mayores. No tengo ni idea de que habrían estado viendo en el autobús, pero fue llegar y verles cual calamares tomando el sol en sus toallas. Rápidamente (y sin decirles nada!!! : ) ) se pusieron cremita por allí, cremita por allá; algún que otro dibujo artísticico de crema en espaldas ajenas.. algún que otro corazoncito en broma y demás juegos con la crema solar (quien iba a decir que un bote de crema diera tanto de sí!). El caso es que ellos solitos fueron los que decidieron no cambiar de calamares a cangrejos.
Luego comieron: respectivo bocata de lomo y entremeses, rato de digestión y a la piscina. Siesta, cartas y juegos. Y a las horas se tuvieron que despedir de los pequeños. Los peques con medio parpado abierto y un párpado cerrado, dispuestos a echarse otra siesta en el autobús dijeron adiós a Romangordo y volvieron al campamento base. Esta vez BobEsponja, Calamardo y Patricio no consiguieron mantenerles despiertos.
Volvamos a los mayores! ¿dijimos que eran como ranitas no? Salto por aquí, salto por allá.. remojadita en la charca y ratejo al sol. Pues eso, que se lo pasaron bastante bien.
Al anochecer, velada de juegos en la plaza del pueblo (un poco distinta que la de los peques, aunque no se libraron ni de ser ocas y patos ni de ser Carolinas y Pepotes : ) ).
Ya por la noche, en las tiendas, les acomodamos a todos y dimos instrucciones similares que a los pequeños. El sol sale a las 6-7 de la mañana... etc : )
A la mañana siguiente hicimos las visitas programadas a los diferentes sitios de interés del pueblo, otro remojón en la piscina y comida especial de menú en el restaurante de la piscina.
Yyyyyy llega el momento de recoger las tiendas.. esta vez algún que otro mayor nos echó una mano. Por la tarde hicimos un rato de piwi y juegos y nos encaminamos (ya todos toditos) al cuartel general. Y con un: "Adiós ROMANGORDO!!!!!!", "hasta el año que viene" nos preparamos para un más que merecido descanso en el autobús.
El equipo del blog.
miércoles, 13 de julio de 2011
¡Hasta el próximo año Romangordo! (primera parte)
Hola a todos,
La última expedición a Romangordo acaba de llegar al colegio. El día 11 y 12 hicimos llegada un aguerrido grupo de niños y monitores preparados para conquistar el pueblo. Pero claro, de la forma que ya les tenemos acostumbrados: con risas, chapuzones, canciones y una sonrisa en la cara. Vuestro querido “informatic` team” estaba entre ese elegido destacamento de monitores.
Pero claro, ¡como íbamos a dejar el blog desamparado!. Antes de irnos de acampada nos hicimos con un becario. El pobre nos aguanto un día y desertó. Bueno, dejando a un lado las bromas, intentamos seguir con el blog desde Romangordo. Internet nos aguanto un día… y luego falleció. Dimos intrucciones a los que se quedaron guardando el campamento general en el colegio, pero a falta de material fotográfico desistimos. Como dice el refrán: “ Nunca es tarde si la dicha es buena”. Y ahora por fin llega la dicha esa.
Hemos corregido las fotos de la actuación, hemos subido las fotos de los mayores y dentro de un poquito subiremos las fotos que nos quedan.
Bueno, os vamos a contar como fueron nuestras andanzas por tierras Cacereñas:
Nos montamos en el autobús y tras algo así como dos horas y media viaje viendo películas y episodios de Bob Esponja, los monitores bajamos del autobús con la cabeza cuadrada, amarilla y llena de agujeros, tras el examen pertinente en el médico, se nos confirmó que era un mal muy común entre padres; su cura fue un ratito de descanso en la gasolinera y una cocacola. Os informamos que los niños, que estaban eufóricos al bajar del autobús, están endeudados con la SGAE por repetición infinita de la canción intro de la serie: “ Quien vive en la piña debajo de….”. Tras conmutársele la deuda a los niños bajo promesa de controlar sus cánticos, próseguimos el viaje y llegamos a.. (momento de atención) RRRRROMANGORDO.
No tardamos mucho en dejar las cosas, ponernos el bañador e ir a la piscina. ¡Vaya piscina! En menos de lo que se tarda en decir “califragilísticoespialidoso” ya teníamos a los chic@s bajo las duchas a punto de meterse en la piscina. Al ratito comimos nuestro famoso “bocata de lomo” (guiño a los seguidores y niños del camapa del año pasado : ) ) e hicimos la digestión como todo buen castellano: algunos siesta, otros cartas.. aunque los más decidieron participar en los juegos que los monitores habían preparado.
Y llega el momento tiendas. Este año que hemos ido primero con los peques y hemos dejado que se diviertan mientras algunos de nosotros montábamos todo el “tienderío”.
Por la noche hicimos velada de juegos y canciones en la plaza del pueblo. ¡¡Preguntadles, preguntadles!! Hasta los más tímidos se partían de risa con las canciones y juegos de los monitores. Todos fueron ocas y patos y “estaban descalzos” (no literalmente) y fueron Carolinas y Pepotes, aunque todo eso ya os lo contarán ellos cuando os vean.
Antes de irnos a dormir, distribuimos las tiendas. Tras avisarles que sí, que aunque parezca mentira el sol sale a las 6 o 7 de la mañana, que el que salga el sol no implica despertarse y que quedarse en la tienda dormitando hasta que les levantemos está genial : ), se quedaron hablando por la noche un ratito y se durmieron tan contentos.
El día siguiente tuvimos excursión a la “casa de los aromas” y a la “casa del tío Cascoles”. En este últimos sitio ya estuvimos el año pasado, pero merece la pena repetir para los acampados más nuevos. Comimos menú especial que nos hicieron el la “piwi” yyyyyyy…. llegaron los mayores. El grupo de mayores y el de pequeños convirían durante unas horas.
(continuará…)
La última expedición a Romangordo acaba de llegar al colegio. El día 11 y 12 hicimos llegada un aguerrido grupo de niños y monitores preparados para conquistar el pueblo. Pero claro, de la forma que ya les tenemos acostumbrados: con risas, chapuzones, canciones y una sonrisa en la cara. Vuestro querido “informatic` team” estaba entre ese elegido destacamento de monitores.
Pero claro, ¡como íbamos a dejar el blog desamparado!. Antes de irnos de acampada nos hicimos con un becario. El pobre nos aguanto un día y desertó. Bueno, dejando a un lado las bromas, intentamos seguir con el blog desde Romangordo. Internet nos aguanto un día… y luego falleció. Dimos intrucciones a los que se quedaron guardando el campamento general en el colegio, pero a falta de material fotográfico desistimos. Como dice el refrán: “ Nunca es tarde si la dicha es buena”. Y ahora por fin llega la dicha esa.
Hemos corregido las fotos de la actuación, hemos subido las fotos de los mayores y dentro de un poquito subiremos las fotos que nos quedan.
Bueno, os vamos a contar como fueron nuestras andanzas por tierras Cacereñas:
Nos montamos en el autobús y tras algo así como dos horas y media viaje viendo películas y episodios de Bob Esponja, los monitores bajamos del autobús con la cabeza cuadrada, amarilla y llena de agujeros, tras el examen pertinente en el médico, se nos confirmó que era un mal muy común entre padres; su cura fue un ratito de descanso en la gasolinera y una cocacola. Os informamos que los niños, que estaban eufóricos al bajar del autobús, están endeudados con la SGAE por repetición infinita de la canción intro de la serie: “ Quien vive en la piña debajo de….”. Tras conmutársele la deuda a los niños bajo promesa de controlar sus cánticos, próseguimos el viaje y llegamos a.. (momento de atención) RRRRROMANGORDO.
No tardamos mucho en dejar las cosas, ponernos el bañador e ir a la piscina. ¡Vaya piscina! En menos de lo que se tarda en decir “califragilísticoespialidoso” ya teníamos a los chic@s bajo las duchas a punto de meterse en la piscina. Al ratito comimos nuestro famoso “bocata de lomo” (guiño a los seguidores y niños del camapa del año pasado : ) ) e hicimos la digestión como todo buen castellano: algunos siesta, otros cartas.. aunque los más decidieron participar en los juegos que los monitores habían preparado.
Y llega el momento tiendas. Este año que hemos ido primero con los peques y hemos dejado que se diviertan mientras algunos de nosotros montábamos todo el “tienderío”.
Por la noche hicimos velada de juegos y canciones en la plaza del pueblo. ¡¡Preguntadles, preguntadles!! Hasta los más tímidos se partían de risa con las canciones y juegos de los monitores. Todos fueron ocas y patos y “estaban descalzos” (no literalmente) y fueron Carolinas y Pepotes, aunque todo eso ya os lo contarán ellos cuando os vean.
Antes de irnos a dormir, distribuimos las tiendas. Tras avisarles que sí, que aunque parezca mentira el sol sale a las 6 o 7 de la mañana, que el que salga el sol no implica despertarse y que quedarse en la tienda dormitando hasta que les levantemos está genial : ), se quedaron hablando por la noche un ratito y se durmieron tan contentos.
El día siguiente tuvimos excursión a la “casa de los aromas” y a la “casa del tío Cascoles”. En este últimos sitio ya estuvimos el año pasado, pero merece la pena repetir para los acampados más nuevos. Comimos menú especial que nos hicieron el la “piwi” yyyyyyy…. llegaron los mayores. El grupo de mayores y el de pequeños convirían durante unas horas.
(continuará…)
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